En este numero:▪ Editorial.
▪ La celda vacía, el vuelo eterno… la permanente insurrección.
▪ En prisión compañeros acusados del ataque a la guarida de la P.D.I.
▪ La propaganda es un arma…
▪ Comunicados desde la C.A.S (Esteban Huiniguir y Marcelo Dotte).
▪ DESDE EL SUR:
- Presos Políticos Mapuche detienen traslado y resgistro de ADN, con lucha y movilización.- Detenido compa acusado de porte de bombas molotov.
- Waikilaf nuevamente preso.
▪ INTERNACIONAL:
- Jornada internacional contra la expulsión de Freddy y Marcelo.- Comunicado de presxs anarquistas y veganxs, Italia.
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Tambien puedes encontrar los boletines anteriores desde el blog http://www.presxsalakalle.blogspot.com/Contacto: Presxsalakalle@gmail.com
Editorial
Septiembre negro paso, la fecha del calendario aún temida para la mantención de la paz social transcurrió y se llevo a un par de hermanos al intestino de la bestia, como venganza al ataque contra la guarida de homicidios.
La prisión sigue ahí, incólume, aparentemente indestructible y eterna, tragando y tragando a compañerxs, pero nuestro actuar no es pasivo, no ha sido de lamentación y/o pasividad (Al menos no en quienes desean realmente destruir la autoridad) sino de una propaganda constante (y tediosa para quienes podrían llegar a aburrirse de escuchar enumerar y enumerar los nombres de hermanxs secuestradxs por el poder).
La practica e idea anticarcelaria (¿se podría llegar a ser anticarcelario sin ser anticapitalista o antiautoritario?) no hace referencia a una vaga idea de estar contra las cárceles como concepto abstracto, o de angustiarse por las eternas condenas de compañeros, tampoco de una preocupación solamente asistencialista.
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Editorial
Septiembre negro paso, la fecha del calendario aún temida para la mantención de la paz social transcurrió y se llevo a un par de hermanos al intestino de la bestia, como venganza al ataque contra la guarida de homicidios.
La prisión sigue ahí, incólume, aparentemente indestructible y eterna, tragando y tragando a compañerxs, pero nuestro actuar no es pasivo, no ha sido de lamentación y/o pasividad (Al menos no en quienes desean realmente destruir la autoridad) sino de una propaganda constante (y tediosa para quienes podrían llegar a aburrirse de escuchar enumerar y enumerar los nombres de hermanxs secuestradxs por el poder).
La practica e idea anticarcelaria (¿se podría llegar a ser anticarcelario sin ser anticapitalista o antiautoritario?) no hace referencia a una vaga idea de estar contra las cárceles como concepto abstracto, o de angustiarse por las eternas condenas de compañeros, tampoco de una preocupación solamente asistencialista.
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