Minimanifiesto por el deber de robar
Con toda esta alza de precios, con tanto IVA, impuesto a la guerra, aumento en las cuotas de aquí y allá y con tan poco, tan poquísimo aumento del salario (en realidad si lo medimos en términos de salario real lo que sucedió fue una disminución de este), pues quedan claras varias cosas:
Primero: que lxs colombianxs tenemos "huevo", una capacidad de ser mártires y resignarnos ante una perspectiva cada vez más cercana a la hambruna general reivindicamos la "berraquera" y la capacidad de "rebusque" que nos caracteriza no sólo aquí sino en cualquier lugar donde podamos ser bestias de carga.
Segundo: que cada vez es más justificado el dejar de trabajar, el desempleo voluntario es en este momento una opción mucho más digna y reivindicable que cualquier ética del trabajo. Con dejar de trabajar no sólo asumimos nuestra autonomía sino que además nos vemos obligadxs a asumir relaciones libres y de apoyo mutuo con las personas que nos rodean. Sin embargo el desempleo voluntario está muy lejos de ser una nueva forma de "rebusque", es la búsqueda constante de una nueva forma asumir el control de nuestra vida cotidiana disminuyendo al mínimo el consumo y manteniéndonos en una economía al márgen del mercado. Esto implica vivir cada vez con menos dinero, buscar formas más éticas de relacionarnos con los demás y con la naturaleza, dedicarle mucho más tiempo al ocio y al amor, y sobre todo reaprender lo que la civilización nos ha quitado: el cocinar, el cultivar, el sanar y todas las demás cosas de las cuales dependemos del sistema.
Tercero: que ahora más que nunca es justificable y necesario asumir el robo de mercancías y servicios como un estilo de vida no marginal sino activamente opuesto a la economía de mercado; mientras en europa y estados unidos se asume como una acción anticonsumo en nuestro país es además una labor de supervivencia que debería ser masificada. Protestas y manifestaciones deberían incluir dentro de sus actividades el saqueo y destrucción de almacenes, supermercados y bancos; cada activista y persona en general debería entrar a un supermercado con el único objetivo de robar, no importa ya si son objetos de primera necesidad o algo más, y si además podemos dañar algo que no estamos hurtando pues todavía mejor. ¿No es mejor que dejar de tomar coca-cola dañar sistemáticamente aparadores y envases? ¿y no es todavía mejor si nos podemos llevar unos cuantos litros para nuestras casas?
La ética del robo es ya bastante antigua, textos como Steal this book de Abbie Hoofman demuestran lo anterior [tenant.net] , colectivos como Crimethinc en estados unidos y europa [www.crimethinc.com] [www.crimethinc.com] y Yomango en españa [www.yomango.net] son además ejemplos de como el robo es un arma para el activismo además de una opción de supervivencia. Además es una actividad bastante común que realizan miles de personas desde que existe la propiedad privada.
Robar no es pecado
robar no afecta el trabajo de las personas
robar no incentiva el consumo de otra forma
Al liberar un producto te estás liberando a tí mismo
no estás robando el bolso de una abuelita en una calle, le estás simplemente quitando un pelo a un gato muy, muy gordo.
Comienza con algo pequeño, con un dulce, con un paquete de cigarrillos, al final lo único que tenemos que quitarnos de encima son nuestras autocoacciones, el policía mental que nos han construido por tanto años.
Deberíamos tener más miedo a "rebuscarnos" y "reducir" nuestra "canasta familiar" que a robar nuestros alimentos y otras mercancías de un almacen o supermercado.
CUANDO COMPRAR ES UN LUJO ROBAR ES UN DERECHO
Extraido de: http://salvajismotropical.blogspot.com/
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1 comentario:
Muy bueno.......El miedo es nuestro gran enemigo. Salud y Libertad.
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